Maribel Gómez Cordero

“Quiero que me recuerden como la Comisionada del pueblo”

La principal motivación de Maribel Gómez Cordero, Comisionada del Distrito 4 - Condado de Orange, es su deseo de servir con amor.  Su trabajo ha favorecido a miles de individuos y familias, convirtiéndose en una verdadera inspiración.

El reto es más intenso debido a los difíciles momentos que la comunidad ha enfrentado por causa de la Covid-19. En este último año, ella y su equipo de trabajo, han tenido que buscar los recursos necesarios para llevar alimentos a los más vulnerables, así como elementos de bioseguridad básicos para sobrevivir a la pandemia.

“Sería difícil describir en una oración la función de un Comisionado, lo que sí les puedo decir es que los residentes de mi distrito están pasándola muy mal por causa del virus, a muchos se les ha dificultado el pago de sus obligaciones. Una de mis labores es brindar asesoría sobre desviación de desalojos y ayudas de renta. También le colaboramos a nuestros seniors de la edad de oro a agendar sus citas de vacunación, entre muchas otras acciones. El trabajo nunca para,” dice la Comisionada. 

Nació y creció en la isla de Puerto Rico, llegó a los Estados Unidos en busca de una mejor educación para sus tres hijos, cursó una maestría en Asesoramiento de Salud Mental en la Webster University con una especialización en Matrimonio y Familia. Además de haber recibido importantes premios y reconocimientos por su labor a la comunidad, se destaca por su activa participación como voluntaria y miembro de diferentes programas relacionados con víctimas de violencia doméstica y abuso sexual, población “homeless” y con problemas mentales de diferente índole.

A lo largo de su vida laboral, siempre se ha desempeñado apoyando a la comunidad de una u otra manera. ¿Qué la mueve, cuál ha sido su principal motivación? 

La gran necesidad que veo en la comunidad motiva mi deseo de servir. Luego de trabajar en el Departamento de la Familia, viví muy de cerca la problemática existe, fue ahí donde se me abrieron puertas para seguir aportando.

¿Cuál ha sido su trabajo más retador? 

En el Departamento de la Familia como Supervisora de Unidad, donde trabajé con niños y niñas removidos de sus hogares.

Ha sido acreedora de infinidad de premios y reconocimientos por su labor profesional. ¿De cuál se siente más orgullosa y por qué? 

Siempre agradezco estos reconocimientos, como el “One Person Can Make A Difference Award” entre otros, pero la realidad es que mi servicio nuca será en busca de premios. Hay mucho trabajo tras bastidores que llevo a cabo con el corazón, aun cuando otros no se enteren. El reconocimiento que me llena de orgullo, es el haber sido elegida por el pueblo para servirles honradamente. Es una responsabilidad que asumo con mucha humildad y amor, sobre todo con Dios por delante guiando el camino.

¿Cuáles son los canales de comunicación con su comunidad?  

Soy muy activa en las redes sociales. Siempre comparto información esencial para mantener a mi comunidad informada.  También a través de boletines informativos, TownHalls, reuniones virtuales (por la pandemia). Para mi es vital ser asequible a la gente. 

¿Cómo logra ese balance entre su vida profesional y familiar? 

El balance lo creo descansando, orando, siendo disciplinada con el tiempo para compartir con mi familia. 

Cuando termine su labor como Comisionada ¿Cómo desea que la recuerden? 

Quiero que me recuerden como una servidora pública preocupada por las necesidades de la comunidad y no por otros intereses. Quiero que me recuerden como la Comisionada del pueblo, siempre abierta a escuchar.

¿Qué mensaje quiere enviarle a esta comunidad de mujeres, de Tu Revista Mujer? 

Que el cielo es el límite, que en la unión está la fuerza y siempre podemos lograr todo lo que nos propongamos si lo hacemos con amor y honestidad.